Escuchar es una habilidad crítica. Cada vez lo será aún más.
Desarrollarla requiere de un esfuerzo deliberado pues muchas veces nuestra tendencia es escuchar nuestra propia voz interna para definir qué responderemos o cómo reaccionaremos, en lugar de escuchar realmente a la otra persona.
¿Cómo estás escuchando hoy a tu equipo, tus jefes, a tus clientes?. ¿A tu gente cercana? ¿A tu familia?.
El desafío es escuchar para entender no para responder.